Publicado en Ciencia y Tecnología, Correspondecia Recibida, VISIBILIDAD
Quijotesca debió resultar la labor del saliente Director de Colciencias de Colombia a juzgar su estéril lucha contra los molinos de viento que embistió al tratar de hacer cumplir con el espíritu de la Ley y lo que necesita el país para salir del atolladero en que se encuentra. Quizás dentro de su análisis de perspectiva que hizo si es que lo hizo, no previó que le harían creer. Hay un dicho que viene al caso y que cabe mencionar con el debido respeto: “una cosa piensa el burro y otra el que lo está enjalmando”.
Para contemplar el desarrollo de una labor, un proyecto o un programa en muchos países del llamado Tercer Mundo (no me gusta decirlo así), hay que incluir dentro del ANÁLISIS desarrollo de la idea o Plan a ejecutar, una serie de TRABAS, IMPEDIMENTOS, CONDICIONAMIENTOS, COSTUMBRES, interferencias, INTERVENCIONES, FEUDOS, ETC., que históricamente siguen interviniendo o apareciendo para afectarlo de tal manera que el camino al desarrollo queda suspendido en el terreno de las buenas intenciones.
El romper “el nudo gordiano” que nos facilite el salir de la calificación de “ESTADO FALLIDO” que nos dió una calificadora internacional, es la cuestión a plantearse.
Pero, ¿ quién o quiénes deben planteársela? ¿Quiénes son los llamados a iniciar los cambios que se necesitan? Mientras lo averiguamos y pasamos al CÓMO, sólo nos resta cantar aquella canción que dice así:”POR ESO ESTAMOS COMO ESTAMOS, POR ESO NUNCA PROGRESAMOS…”
