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Esta campaña necesita de su apoyo como consumidor….
Celebramos con beneplácito la tímida propuesta del impuesto al consumo de la gaseosa y demás bebidas azucaradas.
El fijarse un Impuesto al Consumo de la gaseosa o los llamdaos refrescos y por extensión, a todas las bebidas azucaradas…. ¡Estamos en mora de hacerlo!
Ahora, hay que cruzar los dedos para que la salvaje respuesta y embestida de los productores, empezando por las multinacionales, no tenga éxito, acepten de buena gana que la salud es lo primero antes que el dinero porque todo sin salud no es nada.
Ojalá que el Derecho a la Salud esté por encima de esa presión que como hidra de mil cabezas, se espera se ejerza a todo nivel. El presupuesto para la salud es exiguo y las ganancias del capital son exageradas.
Un impuesto del 40% sería propicio para comenzar enfrentando el grave problema que se ha generado por el consumo de bebidas azucaradas, generación tras generación, de países del tercer mundo y Colombia no es la excepción.
¡Apoyar el impuesto al Consumo de bebidas azucaradas se ha puesto de moda!
Un diabético con 130 kilos de peso.
