Publicado en Correspondecia Recibida, Música y Canciones
Por:Rogelio Valencia
La aparición en el firmamento artístico del gran tenor lírico viterbo-pereirano- Tony Panesso González ya con hasta hoy 242 obras entre autorías y composiciones es sumamente afortunada y benéfica para nuestra cultura comarcal del viejo Caldas como para las letras y la música colombiana.
Nos llena ese vacío inmenso dejado por Luis Carlos González quien nos heredó, aparte de su copiosa y rica obra poética, 62 letras especialmente para bambucos, y cuyas vidas encuentran puntos convergentes, o diría mejor parecidos, asombrosos:
Son de la misma tierra; tuvieron que interrumpir su bachillerato a muy temprana edad, Luis Carlos a los 16 y Tony a los 18.
Por el fallecimiento de sus padres el primero para ver por su madre y su hermana y el segundo para hacerse cargo de 9 hermanos, la madre y la abuela a quienes se llevó para Barranquilla.
Don Floro González- padre de Luis Carlos-, y don Juan de Dios González- abuelo materno de Tony- fueron negociantes de ganado y carniceros.
Luis Carlos es telúrico raizal en sus afectos reflejando su amor por el entorno próximo, y Tony expresa sus querencias a la patria cantándole a Colombia entera: Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla, Pereira, Viterbo, Bucaramanga, a nuestra hermosa raza negra, al folclor vallenato, a la mujer, el padre , la madre, los hijos, etc.
Estilos diferentes
No pretendo comparar literariamente su producción desde el punto de vista literario entre otros aspectos porque son estilos muy diferentes así toquen ciertos temas comunes como la raza y las costumbres.
Luis Carlos González es considerado, junto a Jorge Robledo Ortiz, grande entre los grandes de los bardos paisas; en cambio Tony confiesa no considerarse poeta en el estricto sentido de esta palabra, pienso que por modestia, porque sus letras de gran factura e intención lírica logran plasmar estampas de riqueza y preciosidad inigualables.
En lo que sí toma distancia Tony del poeta González es en su voz de tenor potente, rica en matices y en sus composiciones maravillosas en cuanto ritmo se le antoje.
Gracias a Dios el Maestro Panesso anda pleno de vida y buena salud a sus 64 años y le deparamos muchísimos más, para acrecentar su talentosa producción que comenzó hace solo 14 años después de llegar a la media centena, con un poco de retardo por promesa hecha a su padre Bernardo Panesso Marín minutos antes del suspiro postrer a los 45 años.
Fuene: eldiario.com.co / LAS ARTES
