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DISFRUTE DE LA VIDA
Se cuenta con el momento presente, se cuenta con lo mejor que uno pueda darse, se asume una actitud positiva, se comienza a llenar de optimismo, se siente valiente al 100%, se deja atrás recuerdos ingratos, se echa al cuarto del olvido resentimientos y odios si aún los hay, se evitan las iras, se aprecia los dones que tenemos y podemos disfrutar en cada instante tales como la salud mental y física, la alegría, el optimismo, el trabajo, la amistad y tantos otros que por la fuerza de la costumbre ignoramos que existen aún si los tenemos junto a nosotros. Vemos un día, con nuevos y renovados propósitos, que sí podemos cambiarnos a nosotros mismos ya que nadie nos puede cambiar y sólo en nosotros está el poder hacerlo. Damos gracias al Todopoderoso por todo y por lo que viene en camino para nuestro progreso material y espiritual. Damos gracias a la vida, a nuestros familiares, a nuestros amigos que nos honran con su amistad y aprecio. Hay tantas cosas por ver…
Si hiciéramos una lista positiva y una negativa, estamos seguros que lo que nos ha acontecido con el pasar de los años tiene un saldo a nuestro favor.
Cabe recordar aquel relato en el cual se narra que a la entrada de un pueblo llegó un viajero y preguntó a un sabio anciano: ¿“Cómo es este pueblo?” A lo cual el anciano respondió con otra pregunta: ¿Y cómo es el pueblo de donde vienes?” El viajero de inmediato le contestó “echando pestes” sobre lo horrible que eran las gentes de donde venía. Más tarde se acercó otro viajero y preguntó lo mismo al anciano y el sabio anciano también contestó con la misma pregunta. El viajero con alegría respondió hablando de lo agradable que la gente del pueblo donde procedía y de lo bien que la había pasado. Este relato refuerza la necesidad de poner de nuestra parte para que nos vaya bien.
No se puede ser “luz en la calle y oscuridad en la casa”. Una actitud positiva, armónica con lo que deseamos ser, hacer y obtener de la vida en cada instante, es lo más apropiado para que las cosas comiencen a evolucionar a favor nuestro.
Hay que desarrollar una actitud ganadora y para ello comencemos por cambiar aquellos hábitos negativos que apenas exigen de nuestra parte un esfuerzo de voluntad.
Comience por sentirse las 24 horas del día un ganador y verá cómo su manera de actuar y positivismo, le harán posible todo en esta vida. ¡Ánimo!
