“¿QUÈ SIGNIFICA SER POBRE?
Un padre rico, queriendo que su hijo supiese lo que es ser pobre, lo llevó a pasar unos dias
con una familia de campesinos.
El niño estuvo 3 dias y 3 noches vivendo en el campo.
Al volver para la ciudad, todavia en el coche, el padre le preguntó:
¿Què tal tu experiencia?
-Bien, respondió el hijo, un poco distante.
-¿Aprendiste algo? Insistió el padre.
-1 – Que nosotros tenemos un perro y ellos tienen cuatro. ... ...Continuar Leyendo [+]
Todos tenemos como guerreros que librar batallas y la màs importantes uno la libre a cada instante dentro de uno mismo con uno mismo. En ese escenario, es donde uno se encuentra con “los familiares nocivos hàbitos y apegos” a los cuales uno debe eliminar si es que se ha tomado conciencia de que el desarrollo espiritual es lo que en esta vida presente se espera que uno haga por si mismo.
https://www.youtube.com/watch?v=tmisXIiDJU8
Nota: “Solo con la repeticiòn se aprende” decìa Yogananda. ... ...Continuar Leyendo [+]
“Señor Dios, dueño del tiempo y de la eternidad, Tuyo es el hoy y el mañana, el pasado y el futuro.
Al acabar un día más, quiero darte GRACIAS por todo aquello que recibí de Tí.
Gracias por la vida y por el amor, por las flores, por el aire y por el sol, por la alegría y por el dolor, por lo que fue posible y por lo que no fue. ... ...Continuar Leyendo [+]
Ayúdame a decir la verdad delante de los fuertes y a no decir mentiras para ganarme el aplauso de los débiles.
Si me das fortuna, no me quites la razón. Si me das éxito, no me quites la humildad.Si me das humildad, no me quites la dignidad.Ayúdame siempre a ver la otra cara de la medalla,
no me dejes inculpar de traición a los demás por no pensar igual que yo.
Enséñame a querer a la gente como a mí mismo.
No me dejes caer en el orgullo si triunfo, ni en la desesperación si fracaso.
Más bien recuérdame que el fracaso es la experiencia que precede al triunfo.
Enséñame que perdonar es un signo de grandeza y que la venganza es una señal de bajeza.
Si me quitas el éxito, déjame fuerzas para aprender del fracaso.
Si yo ofendiera a la gente, dame valor para disculparme y si la gente me ofende, dame valor para
perdonar.
¡Señor…si yo me olvido de tí, nunca te olvides de mí!