Publicado en Remedios Caseros
El llantén es un excelente alivio para la úlcera.
Tome unas hojas de llantén y licuélas hasta obtener el zumo correspondiente a la altura de una copa pequeña. Tómelo cada vez que se repita el dolor.
En caso de que disponga de las hojas a mano y no quiera licuarlas, simplemente mastíquelas.
Nunca descarte el médico para un diagnóstico más preciso.