Publicado en Ecología
“Conocer al detalle tu situación financiera y darle prioridad a la compra de productos realmente importantes son los consejos básicos para ser un consumidor inteligente. Te proponemos conocer más tips.”
Siempre, tanto en épocas de bonanza como de crisis, es conveniente tener presente cuáles son tus prioridades a la hora de hacer compras para poder ejercer de la mejor manera posible tus derechos como consumidor y elegir bien. Te propondremos algunos consejos para que puedas ser un consumidor inteligente.
Para poder llevar un mejor control de los gastos y de la economía doméstica es aconsejable que como consumidor definas, de forma clara, cuáles son tus gastos. Esto te permitirá llevar un detallado registro de los mismos y si debes rescindir la compra de algún producto sabrás con facilidad cuál será.
Tener un conocimiento certero acerca de la situación financiera personal te permitirá identificar de mejor manera los ingresos y los gastos.
Con la finalidad de instruir a la población en general sobre cómo consumir es que en México la Procuraduría General del Consumidor realizó una serie de consejos para generar consumidores inteligentes que pueden ser aplicados a cualquier país.
Consumo consciente. El consumidor debe conocer tanto sus derechos como sus obligaciones y asumir las consecuencias de sus gastos. Por ejemplo, al momento de adquirir algún artículo en rebaja el consumidor debe conocer las políticas de devolución y las condiciones de garantía.
Consumo informado. Comprar pensando en la relación calidad y precio.
Consumo crítico. El individuo debe razonar ante la publicidad y la moda y valorarse uno mismo por lo que es y no por lo que tiene. En muchas ocasiones sucede que las campañas publicitarias buscan generar nuevas aspiraciones como también necesidades.
Consumo saludable. Cuando compres alimentos, fíjate que sea comida balanceada. Cuida tu salud.
Consumo sustentable. Así como el consumidor debe elegir comprar aquellos productos que sean saludables para su organismo también debes elegir aquellos que sean ecológicos y amigables con el medio ambiente.
Consumo solidario. Compra aquellos productos de elaboración artesanal o producidos por empresas socialmente responsables o que lleven adelante políticas laborales justas y procesos de producción limpios.
Consumo activo. Es bueno que hagas compras en conjunto con otros individuos, el tejer alianzas te permite intercambiar experiencias sobre consumo y así poder elegir mejor entre las marcas y los proveedores.
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