Publicado en Amor, AutoAyuda, Consultorio, Mujer
En general todo lo que nos pasa es porque tenemos algún pendiente por aprender cuando se trata de cosas que nos parezcan muy desagradables o creemos que no las merecíamos.
Inicialmmente tenemos muchos indicios que señalan un camino equivocado en una relación o cómo estamos haciendo lo que hacem,os, cómo sentimos o como poseemos algo.
Nos olvidamos que el objetivo principal que no debemos olvidar siquiera por un instante es el de SER felices. Equivocamos entonces nuestras decisiones o apegos y reemplazamos aquí en la tierra cosas o querencias por el objetivo principal que es el ser felices.
Si alguien se comporta mal con nosotros muchas veces nos llenamos de rencor o resentimiento, si no nos aceptan nos sentimos mal y creemos desfallecer, nos echamos la culpa o nos preguntamos a nosotros mismos ¿por qué a mí me sucede esto? y continuamos por la misma línea de razonamiento como si de esa “mala experiencia” que estamos pasando no tuviéramos que sacar una saludable y perdurable LECCIÓN de vida.
De lo que si podemos estar seguros es que saldremos fortalecidos y mejor prepatados para la próxima vez que nos veamos expuestos a una experiencia similar o nueva prueba de vida.
A veces cuando no se aprende por las buenas se aprende por las malas dice un adagio y algo tiene que ver con la actitud y aptitud que p0ongamos hoy para no dejarnos hundir en un mar de lágrimas y lamentaciones que lo único que nos quita es un mejor futuro y capacidad para mejorar,
No perdamos de vista el hecho concreto de que nuestra misión es SER FELICES y si alguien o algo se aleja de nosotros es porque ese alguien o ese algo no era para nosotros. Ese alguien o e4se algo fue nue4stro maestro y ya nos dió su lección, ya debe salir de nuestra vida y nosotros de la de él. Hay que evitar el egoísmo, el egocentrismo y demás apegos que nos limitan la posibilidad de continuar creciendo en los planos mental y espiritual para en realidad buscar nuestro propio camino y nuevas experiencias.
