Publicado en Correspondecia Recibida
Por: José Neira Rey
EL GRAN COMPROMISO DE LA ACADEMIA Y LA NECESIDAD DE UNA FRONTERA AMABLE, INNOVADORA, ACTIVA, SOLIDARIA Y EMPRENDEDORA
1.-Quienes creemos y defendemos que la identidad regional es un patrimonio muy valioso que junto al sentido y espíritu de pertenencia, son los que confieren y otorgan arraigo a los que nacen, conviven o se domicilian en una zona o área que configura ese determinado territorio, hemos hallado –para satisfacción y contento de los que han indagado sobre la necesidad de un elemento aglutinador y orientador, que llegue hasta el meollo mismo de los problemas que se han acumulado por un vivir individualista, facilista, inmediatista y poco evaluador de los potenciales existentes –que, la academia, si la fortalecemos con la participación de todas la universidades con asiento y vigencia en nuestros límites, bien sea de región nacional o de frontera binacional -tal como lo constituye la colombo-venezolanidad con nuestros vecinos y hermanos del Estado Táchira – puede transformarse en la gran guía y orientadora.de los planes, programas y proyectos que debemos y podemos cumplir ,para salir de nuestro actual estado de subdesarrollo, marginalidad y dependencia , producto de nuestra propia culpa y ante la carencia de una noción cívica más innovadora ,participativa, asociada, solidaria y visionaria. Y, lo anotamos y registramos con entusiasmo, porque en el análisis hecho con los directivos, miembros integrantes e invitados especiales de la Corporación ACCIÓN NORTESANTANDEREANA Y FRONTERIZA- que ha surgido como respuesta a la crisis que estamos padeciendo- de manera franca- y ,por ello sin dubitaciones, temores o suspicacias – se ha llegado a la conclusión, que la academia, es la llamada a socorrer y auxiliar al núcleo dirigencial de la región y de la frontera –entendida y compuesta, con sus dos mitades- en los aspectos elementales y básicos, como en aquellos donde la ciencia ,la tecnología ,los métodos y aplicaciones modernas y prácticas, lo adviertan o requieran.
2.- Seguir creyendo que los municipios, la región y la frontera en su contexto especial y dentro de su tipología y características singulares, puede continuar bajo los parámetros de la pasividad y siendo indiferente a lo amable y grato que debiera constituir el gran atractivo promocional de nuestro devenir, constituiría un craso error, parecido o igual ,a negar que necesitamos de nuevas actitudes y conductas, así como de un giro renovador llevando a los cargos y puestos de comando a dinámicos gerentes, que obren sobre una programación bien elaborada y no dependan de los avasalladores caciques electoreros que han hecho de los partidos y de los ideales regionales, unas lamentables colchas de aspiraciones, con frustrantes resultados.
3.-Si la academia,–con todos sus docentes – asume la responsabilidad de este compromiso – que bien puede hacerlo, en virtud de su autoridad, independencia, capacidad, interrelaciones y propósitos estructurales – la transformación y el cambio vendrán por añadidura. Además, nadie podrá sentirse excluido. La Universidad Antonio Nariño, ya dio los primeros pasos; la UFPS, con su grupo motor, avanza en precisiones; La Libre impulsa su centro de investigaciones y la ANIES- que congrega e integra a todas las Universidades con asiento en el Norte de Santander y el Estado Táchira- ahora, bajo la Presidencia de la Universidad de Pamplona, son signos y señales de importancia.
