Notas al margen Por: José Neira Rey
1.-Porque la verdad no puede ocultarse y el que lo intenta, perjudica y afecta el normal desenvolvimiento de todo el conjunto social, es una expresión que los habitantes de las zonas fronterizas, pueden demostrar, porque la marginalidad, el escaso desarrollo y el increíble abandono que registran, es producto de una indiferencia de proporciones mayúsculas, que entre otras cosas, ha generado :el aprovechamiento indebido de la delincuencia, la irrupción de la cultura del atajo o sea del inmediatismo, facilismo y caciquismo politiquero y la postergación de lo primario y fundamental, como sin equívocos y prioridad, lo son : las vías de acceso, los servicios básicos, la educación, la salud ,la creación de fuentes de empleo y la expedición de Incentivos, Estímulos y Mecanismos que evaluando las realidades y potenciales de cada zona fronteriza, permitan aprovechar sus ventajas comparativas y lo que existe o se proyecta en su entorno. Y, anotamos lo anterior, porque cada zona fronteriza es distinta ,dado que cada una posee unos particulares que la caracterizan y distingue, de las demás. Por eso, el caso de las Islas, no es lo mismo al que requiere el Putumayo, ni lo de Arauca, es igual a lo que le urge al Choco, etc, etc. Por eso, cuando se hable de un Plan Especial para o de Fronteras, hay que saber precisar y distinguir lo general, de lo específico, así como la urgencia de la asistencia o ayuda y las condiciones o tipicidades que son exigentes, para determinadas prerrogativas o posibilidades.
2.-Destacamos lo anterior, porque sobre las fronteras han rodado muchas palabras y se han fijado pautas y programas, que hoy, se reducen a una Oficina Intersectorial, adscrita al Ministerio de Relaciones Exteriores – que no se reúne, ni fija derroteros convocando a sus miembros – y que en nada remplazó a la Secretaria de Asuntos Fronterizos, que estaba en directa interrelación con el Departamento de la Presidencia de la República y a la que el Presidente Belisario Betancur ,le otorgó trato ministerial y vida, a empeños e iniciativas que hoy subsisten, pero que requieren de más apoyos , como era el propósito de quienes trabajaron y llevaron hasta el Congreso de la República, la creación del Ministerio de Fronteras ,que nació del Movimiento de Unidad Nortesantandereana MUAN, se precisó en el Comité de Fronteras de Confecámaras, compuesto por diligentes miembros de las Cámaras de Comercio, ubicadas en frontera y en el Congreso, lo lideró- con éxito- Félix Salcedo Baldión.
3.- Infortunadamente, distinto a lo acontecido en esa etapa de los años 80 y parte de los 90 – cuando las Intendencias y Comisarías, pasaron a Departamentos, se crearon Corporaciones Autónomas de Desarrollo y se hizo participe a toda la estructura operativa del Estado, solicitando atención al sector privado y a todos los ministerios en el Comité Técnico de la SAF o Secretaria de Asuntos Fronterizos y con la cual hasta se celebraron Cumbres Nacionales de Frontera, la representatividad fronteriza, tanto en lo Legislativo, como en lo Ejecutivo, no ha tenido el vigor y fortaleza, de esos tiempos, porque el país político y el país económico, se olvidaron y no han visualizado, ni entendido el problema social y de inseguridad, que viven estas fajas territoriales abandonadas de los poderes Centrales, y tanto de un lado, como del otro, de la frontera.
Y, si aludimos al uno y al otro, es porque para una plena mancomunidad y progreso comunitario ese PLAN ESPECIAL DE FRONTERAS – que ahora se anuncia – debe incluir : Acuerdos y entendimientos con el país vecino, para así poder superar : la informalidad, el desempleo, la violencia ,la inseguridad generalizada y estructurar el desarrollo compartido.
Y, es tanto lo que hay por hacer en frontera, que hasta el problema de la paz, tendría verdadera perspectiva de solución, si con juicio, ponderación, representatividad y visión futurista, se examina lo que hay y se vive en frontera. Sí, en estos nudos de integración.