Notas al margen Por : José Neira Rey
1.-La realidad regional y fronteriza – sin consideraciones de partido, grupos o rosca alguna, que no sea el penetrar en el meollo y verdadera esencia de cuanto está aconteciendo y saturando de preocupación el futuro departamental y el progreso de las provincias y municipios, que integran la vivencia de nuestra comarca y zona de realización- exige, sin exclusión de nadie y sí, con el compromiso de todos, un verdadero y sincero enfoque, sobre : nuestras prioridades, debilidades ,peligros y opciones, que se enmarcan dentro de lo nuestro. Y, con labor asociada y firmemente compartida, formular y promover, el propósito de unas acciones y conductas permanentes –con seguimiento continuo-hasta llegar, a lo que esperamos y ansiosamente anhelamos realizar. El momento, no es para perder el tiempo, ni para dejar pasar oportunidades de aglutinamiento y gestiones que se pueden concertar, porque toda postergación de determinaciones o cualquier error en apreciaciones que comprometan el porvenir de esta esquina de la República, la pagaran caro, no solo quienes la habitamos, sino el eje binacional de esta frontera colombo-venezolana, que tiene ventajas comparativas y oportunidades que no se han aprovechado cabalmente, porque cuando se instauro la mentalidad exportadora : del añil, la quina, el cacao y luego vino el ferrocarril ,las carreteras, y se introdujo el café ,mediante el establecimiento de relaciones y empeños mayores que trascendieron, porque hubo núcleos progresistas que hicieron mucho, como lo atestiguaron : alemanes, italianos, franceses, catalanes ,etc., ahora: están en suspenso. Y, sin el agarre y la pasión, de unos deseos de coparticipación y de hacer y de llegar hasta unas metas mayores, porque estas, siguen sin definirse o carecen de la fuerza y el empuje de una motivación que conduzca al éxito y al cambio y a la transformación de lo que estamos experimentando. Y, porque en la frontera, requerimos de ejemplarizantes políticas de Estado.
2.-Sí, el momento, no es para hacer más divisiones y fragmentaciones de opinión. Y, menos, cuando lo que necesitamos – y urge su presencia – son directivos informados y capaces, con señalado espíritu de servicio y ánimo firme de acertar. Tampoco, es para crear pugnacidades, por valoraciones y fragmentaciones ideológicas, que no sean: el abrirle camino al progreso y al desarrollo regional y fronterizo, de manera: abierta, clara, honesta y transparente. Además, porque hay gentes, con conocimientos y dispuestas al aporte de su integridad y espíritu de servicio.
3.-Por ello, ¿Por qué no convocar, a los más destacados exponentes y patriarcas o matriarcas, de: Cúcuta, Ocaña, Pamplona y la región en general, para: analizar y decidir, lo que mejor debe hacerse? ¿ Por qué, no llamar a los que integran la conciencia viva, de ,la región y la frontera – .para que se reúnan y asuman la fijación de derroteros y estrategias que despierten y dinamicen a los cuadros representativos y así ,se precise un camino y una ruta y tarea por cumplir ? ¿Acaso, las divisiones partidaristas de antaño, tienen vigencia? ¿No es este un momento de cambio y de definiciones y de responsabilidades, si auténticamente queremos: investigar, competir, innovar y progresar? ¿Quién se opone a la necesidad y vigencia de la unión regional y la labor compartida? Una postura de esta naturaleza, abriría compuertas y fijaría derroteros de amplia resonancia y perspectiva. ¿Por qué no intentarlo? ¿Por qué no convocar –hombres y mujeres- a nuestros mejores y mayores exponentes, para que hagan despertar y activar al conjunto, en procura de la transformación y metas, que ansiosamente anhelamos?
Ud. – si Ud. – quien lea esta nota –y aquellos –que escuchen comentarios y plegarias, son partes integrales de este reto, porque darle la cara y hacerle frente al futuro, necesita: agentes de dirección, acción y retaguardia. Y, si se anima y no duda, de que la propuesta, tienen consonancia, actualidad y vigor: ¡DIVÚLGUELA Y PROMUÉVALA!