Publicado en Correspondecia Recibida
CORRESPONDENCIA RECIBIDA
Hay un relato muy intrigante que menciona un tarro de vidrio, (paìs porque tiene lìmites), viven hormigas de diferentes tamaños, colores y olores (supongo que el autor quiso decir formas de pensar y hacer). De pronto, “alguien” (làstima que alguien no tenga plural directo) o “una mano negra” sacude el frasco y zas se acaba la paz, la armonìa o el proceso institucional democràtico que habìa. Las razones son evidentes: la justicia que viene cojeando desde hace muchos años amenaza a la impunidad y la corrupciòn.
Pero, esa pregunta, ¿Por què se pelean las hormigas?, debe tener alguna explicaciòn lògica para las hormigas. Y sin embargo, al parecer es lo que menos les interesa. ¿Por què?
Hace unos años pasaron por la tele una pelìcula llamada “BICHOS”, y al protagonista que era un bicho màs que se ateviò a hacerse preguntas que lo condujeron a tratar de cambiar las cosas, es decir, “a tratar de salìrseles del huacal” si que le costo sudor y lucha por mejorar la situaciòn de miedo y terror a lo que tenìan sometidos a los demàs bichos porque todos, sin excepciòn alguna, debìan pensar igual, aguantar igual y sobre todo, no pensar diferente.
En realidad la pregunta ¿Por què se pelean las hormigas? no les importa a quienes estàn sacudiendo el frasco, pero lo triste, al parecer para muchos que tradicionalmente desde hace treinta años o màs, ya estàn acostumbrados a recibir “corrientasos” o condicionamientos condimentados de diferente forma, tampoco les importa, es màs, ingenuamente creen que no estàn siendo atacados por quienes una vez màs los engañan y manipulan sin siquiera preguntarse por què y para què, es decir, por alguien que agita la botella. Y muchos de los que lo saben prefieren callar.
Al parecer, los conceptos de familia, paz, justicia social, progreso, solidaridad, democracia y libertad de pronto les son reemplazados por el chip de la manipulaciòn. Desconocen muchos bichos pero no la mayorìa, que quèn (es) sacude (n) la botella no arriesgan nada como siempre, no ponen los muertos pero si lo tiene (n) todo frìamente calculado porque ahora lo que tienen miedo de la Verdad son ellos. “No hay peor ciego que el que no quiere ver”
DIÒGENES
