Publicado en Correspondecia Recibida, VISIBILIDAD
FAMILIA:
En la democracia en que vivimos es posible acudir a la figura de la desobediencia civil y pacífica, sin tumultos, ni pérdidas humanas ni materiales, sin distingos de raza, edad, sexo, religión o credo político.
Esta oportunidad es una de ellas, habida cuenta que la situación económica de nuestras gentes en el Municipio amerita su práctica.
Paisano, únete a esta justa causa, no paguemos el impuesto predial y complementarios hasta que no sea resuelto, de manera favorable al pueblo su aplicación.
No seamos tan toches,
La actualización catastral
Carlos Arturo Andrade
07 de febrero de 2012
Se nos viene un tsunami financiero para los cucuteños por el aumento exagerado en los impuestos de predial por cuenta de la reciente actualización catastral en la ciudad. Esto, por lo manido del tema en los últimos días y porque toca el bolsillo de los que poseen casita, casota o varias, ya están familiarizados. Más sin embargo se reitera: Es una revisión que se hace en el municipio por un organismo especializado, en este caso el IGAC, sobre los elementos físicos y jurídicos del catastro y eliminar las posibles disparidades en el avalúo catastral originadas por mutaciones físicas, variaciones de uso o de productividad, obras públicas o condiciones del mercado inmobiliario. Recordemos la historia: Siendo concejal de Cúcuta (este columnista) en el año 1.993, le correspondió ser ponente del estatuto tributario. La base o sea el valor del predio estaba representado en valores absolutos, no se concedían descuentos por pronto pago, sino que todos los años se producían amnistías por el pago de intereses moratorios y fue necesaria la revisión de tarifas. El concejo de la época aprobó reemplazar los valores absolutos que con el transcurso del tiempo cambiaban de tarifa y era perjudicial para los contribuyentes que mas el ajuste del índice de precios al consumidor, con el cambio de tarifa más alta, le subían exageradamente los impuestos, por el de salarios mínimos mensuales. Se aprobó los descuentos por pronto pago del 10, 20 y 30% que en año 2.005 el concejo eliminó, incrementando nuevamente en forma exagerada el tributo. Y como el avalúo catastral de ese año (1.993) estaba rezagado con relación al precio comercial de los predios, para no afectar las finanzas del municipio y que los contribuyentes pagaran lo que se consideraba justo, se le aplicaron tarifas más altas de las que en su momento se estaban aplicando en otros municipios del país que tenían los valores catastrales más ajustados al valor comercial. Los aumentos en este momento de la base catastral de los predios tienen incremento del 200,300, 400 y 500% según el caso con el ojo clínico del IGAC, que representa igual aumento en el pago del impuesto predial. Se rompe el techo, no el piso como lo dijera el señor alcalde, pues la mayoría de predios quedarían por encima del 10 por mil, como el caso de una humilde casa en Atalaya de avalúo anterior de diez millones de pesos que tenía como tarifa el 6 por mil pasó a sesenta millones con una tarifa del 11 por mil. Y la casa lo puede valer, ya se dijo que venía rezagado el catastral con el comercial. Los reclamos en la mayoría de los casos que aunque no hicieron reformas a sus predios(a excepción de algunos aberrantes que tendrá que resolver el IGAC) estamos casi seguros que no prosperarán con el argumento de que se valorizaron por las condiciones del mercado inmobiliario. El balón lo tiene el señor alcalde con los concejales, que por las declaraciones que ha dado sobre el particular tiene todas las intenciones de solucionar de la mejor manera la situación. El que no se pague más del 100% de impuesto con relación al año pasado, quiero decir que el sistema del municipio no lo contempla de tal suerte que los recibos no se pueden imprimir. Y si se lograra a la carrera modificar el sistema y se pagara el 100%, permítanme presentarles un ejemplo: Una casa o apartamento actual con avalúo catastral de $67’000.000.oo con una tarifa del 11.5 por mil pagó el año pasado $770.000.oo. La actualización del predio quedó en $150’000.000.oo. En el presente año pagaría según la norma, si la pueden poner en práctica, $1’540.000.oo. Para el año entrante tendríamos la siguiente operación: 150’000.000.ooX4% IPC (Índice de Precios al Consumidor) X15 por mil tarifa para un total de impuesto de $2’340.000.oo.
En sólo dos años se triplica el impuesto. Y así seguirá pagando anualmente con el incremento del IPC, hasta una nueva actualización que aumentará nuevamente el tributo. Los concejales y el alcalde deben trabajar para racionalizar las tarifas que actualmente están fijadas de acuerdo con el nuevo panorama que arrojó la actualización catastral. Pero como las normas tributarias entran en vigencias en un periodo fiscal diferente al que se aprobaron, sólo hasta el año entrante tendrían aplicación. El pago del impuesto en cuatro cuotas en el transcurso de año también es buena idea, fue una de mis propuestas como candidato al concejo municipal. Con todo respeto, al señor alcalde, a los señores concejales, máxime con el escandaloso incremento en las tarifas del acueducto y otras más, apelar a lo que la norma contempla: Aplazar la vigencia de la actualización por las especiales condiciones económicas de la ciudad que no permiten un alza de estas características. Con tiempo, con calma, sin sentido alcabalero se ajustan el sistema y las normas y se cobra un impuesto que sea pagable, sin atropellar más el bolsillo de los cucuteños.
